Pisando tierra

Por Soleares

Jesús Manuel Hernández

Apenas casi tres semanas en el ejercicio del poder en la Presidencia Municipal empiezan a dejar saldos rojos, dudas, modificación de estrategias y redefinición de rumbos para Antonio, Tony, Gali Fayad, quien al parecer con la mejor de las intenciones intenta hacer un gobierno transparente y cercano al pueblo.

Unas 60 personas de San Miguel Canoa dieron al traste con el primer intento de llevar el "Progreso a la puerta de tu casa", entre jaloneos, pancartas, gritos y una actitud improvisada de los equipos de avanzada, seguridad y operación, imputable sin duda a Guillermo Aréchiga Santamaría, titular de Gobernación Municipal, maestro, experto en sindicalismo y movilización de masas magisteriales, pero sin el menor ápice de conocimiento del municipio.

¿Cómo fue posible llevar al presidente Municipal a una Junta Auxiliar conflictiva cuando se disputan ya los grupos las presidencias auxiliares?

¿Cómo fue posible que Aréchiga no enviara primero a las avanzadas a reconocer el terreno, a levantar una radiografía de los intereses en juego?

¿Cómo fue posible que no hubiera información de las posibles manifestaciones?

Sin duda se trata de un error de operación política y de inteligencia, de información de los conflictos de la ciudad. Y sólo pudo ser por que los responsables de vigilar por estos asuntos, no entienden, no saben absolutamente nada de lo que pasa en el municipio de Puebla.

A Gali Fayad no le están saliendo las cosas como él quisiera. No es para menos, su buena fe se topa con la imposición de los grupos del gobernador, los enviados no son personas expertas ni en la Ley Orgánica Muncipal, ni en la experiencia de la función y administración pública, pero ahí están, por órdenes superiores para amarrarle las manos a quien se levanta, en primera instancia como un aspirante a suceder a Moreno Valle en Casa Puebla.

Luego entonces habrá que pensar y considerar que la manifestación de las 60 personas, dicen que del PRI, no necesariamente obedeció a Pablo Fernández del Campo o Ambrosio Corona Carbarín, dizque titular del tricolor angelopolitano, pudiera contemplarse en cambio que alguien, algunos tal vez, no quieren que Gali se ande placeando.

¿A quién no le conviene que Gali crezca? Son varios los nombres a enlistar, los primeros, quienes quieren lo mismo que él quiere.

Queda claro que la inexperiencia de los colaboradores ha generado este problema público, pero hay más, donde otros personajes están mostrando incapacidad para organizar las oficinas públicas. Empieza por decirlo así una lucha interna entre los "galistas" puros y los morenovallistas incrustados.

Tony Gali seguramente se ha dado cuenta de la cantidad de piedras que le ponen en el camino y que desde Casa Puebla no hay deseos manifiestos en que el reflector le ilumine completamente, digamos que es un asunto de "egos".

Si Gali quiere gobernar, administrar y llevar el Progreso a la puerta de la casa de los poblanos, tendrá que ir cuidando el cómo, la forma, para marcar sana distancia pues el lodazal que está cayendo le puede salpicar.

jesusmanuelh@icloud.com