Aguilar o Gali




Por Soleares
Jesús Manuel Hernández


Quien lo fuera a imaginar, quién se atrevería a pensarlo, al morenovallismo se le han cerrado los espacios de propuesta para una candidatura el próximo año para suceder al líder moral y físico de su propia corriente.





Rafael Moreno Valle ha venido tejiendo la sucesión de Peña Nieto sin menoscabo de la estatal, la que necesita tener bajo absoluto control para desde ahí seguir catapultando y financiando, claro está, las aspiraciones personales.






Primero fue su propia esposa la candidata "in pectore", luego sería convencido de la imprudencia que eso significaría, entonces alimentó a otros, desde Cabalá Macarí hasta Antonio Gali, pasando por Javier Lozano Alarcón, el crítico del Papa Francisco.





A su mano le sobran dedos para contar a los aspirantes viables, todos juntos suman sólo uno: Antonio Gali Fayad es quien, según las mediciones de propios y adversarios, reúne más condiciones para retener el poder del morenovallismo, lo del partido es lo de menos.





Y he aquí, que a alguien no le ha gustado la idea, siente como que Gali no es del equipo, no sería leal, además es concuño de Estefan Chidiac a fin de cuentas enemigo del grupo que pretende imponer a Puebla en Los Pinos.





Y a veces el descontento no puede ocultarse. La receptora de los disgustos ha sido la primera dama del municipio, se cuenta en la familia.










Y por si algo faltara, panistas como "Paquito" de apellidos rimbombantes, han iniciado el acercamiento con los grupos para proponer que sea Jorge Aguilar Chedraui el candidato y no Antonio Gali Fayad.





Las premisas para convencer a los líderes de los grupos recuerdan mucho aquella época cuando los del equipo de futbol "Líbano" se enfrentaban con el "Plus Ultra" y se recordaba la batalla de Pelayo contra los Moros.





Charlas familiares se salpican estos días, luego del primer informe de Gali, de cómo a Puebla la han ido deteriorando los "árabes" y no hablan de los tacos, y defienden como Pelayo a la tierra no conquistada que un Aguilar, aunque sea Chedraui, gobierne Puebla.





¡Cáspita! dirían algunos.






















Clima:

Entradas populares

Contacto:

d13noticias@gmail.com

Vistas a la página totales