#EtiquetaConDestino: Antonio Gali ahora deberá legitimarse tras proceso
Y en las elecciones del pasado 5 de junio se cumplieron las expectativas que este reportero previó, e incluso se superaron por mucho.
Y las podemos analizar una a una.
La última entrega de la semana pasada el encabezado decía: “PRI sólo tiene seguras 6 gubernaturas el 5 de junio”
Y sólo tiene seguras, entre comillas, sólo 5.
¡El PRI en caída libre!...
Manlio Fabio Beltrones, dirigente nacional del PRI, había ofrecido, pronosticado o asegurado que el Partido Revolucionario Institucional ganaría 9 gubernaturas de las 12 que estaban en juego.
Hoy el PRI está más que derrotado, aunque aún habrán de judicializar algunas de las elecciones, entre ellas Puebla a pesar de la derrota amplia que sufrieron.
PRI pierde: Aguascalientes, Chihuahua, Durango, Puebla, Quintana Roo, Tamaulipas y Veracruz.
PRI se quedará con: Hidalgo, Oaxaca, Sinaloa, Tlaxcala y Zacatecas.
Desde hoy queda claro que para el 2018 la lucha por la Presidencia se vuelve complicada para el PRI.
El PAN recupera fuerza y MORENA está más que puesto para pelear palmo a palmo llegar a Los Pinos.
¿QUE SUCEDIÓ EN PUEBLA?
En pasadas columnas mencionamos que el abstencionismo en Puebla sería alto y que podría llegar al 55 por ciento.
Fue superado al ser del 58.74 %
A las urnas sólo acudieron el 41.26 % de los 4 millones 303 mil 865 ciudadanos del listado nominal. La más bajas de los últimos 18 años.
Con una simple regla de tres de 4 millones 303 mil 865 ciudadanos en el listado sólo hubo 1 millón 775 mil 842 que acudieron a las urnas, con la suma de los sufragios de los 5 candidatos, los votos nulos y los de candidatos no registrados.
La gente está hastiada de los políticos.
El PAN y su abanderado no se cansaron de decir que ganarían por dos dígitos.
Y se cumplió porque la ventaja fue de 11.76 puntos.
Aquí señalamos que quien obtuviera 1 millón de votos ganaba la elección.
No fueron necesarios porque lo lograron con tan sólo 805 mil 899 votos, cifra menor a las dos últimas elecciones para gobernador en Puebla.
Lo cierto es que hoy el que será el próximo gobernador de Puebla, José Antonio “Tony” Gali Fayad deberá legitimarse porque si bien es cierto ganó con el 45.35 de los votos emitidos el pasado 5 de junio sólo significan el 18.72 por ciento del total de posibles electores.
Esa no es la culpa del ganador del proceso, porque él obtuvo la mayoría de los votos conforme a la ley.
Lo que si es cierto, es que el proceso ya está judicializado y será el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación quien resuelva las demandas del PRI y del PRD en el sentido de que hubo excesos en los gastos de campaña del PAN y sus aliados.
Lo grave para quien será el próximo gobernador del 1 de febrero de 2017 al 30 de noviembre de 2018, es que tiene muy poco tiempo para cumplir todas las promesas de campaña que hizo en las 7 regiones del estado, en las sierras, norte, nor-oriental y la mixteca, además de la zona conurbada de Puebla.
Otra situación compleja será como enfrentar la deuda que le heredarán y en la que están comprometidos los recursos estatales, sobre todo el del Impuesto Sobre la Nómina –ISN-, que prometió incluso reducirlo.
En fin, para José Antonio Gali Fayad, el futuro no es tan halagador, pero si jugará un papel preponderante para impulsar al que fue su alfil en su meteórica carrera política, el actual mandatario que hoy más que nunca sueña en lograr la candidatura a la Presidencia de la República, con el PAN o sin él.
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