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Según el pronunciamiento, el incidente ocurrió hace más de dos meses y fue atendido oportunamente por el Consejo Administrativo de la línea. Como resultado, uno de los operadores fue separado de la empresa y el otro recibió una sanción administrativa conforme al reglamento interno, incluyendo una suspensión temporal.
“No aprobamos este tipo de conductas, que no reflejan los valores ni el compromiso de nuestra línea”, señala el comunicado.
La SCTA subrayó que sus operadores reciben capacitación constante y cuentan con indicaciones precisas para garantizar una conducción responsable. Asimismo, reconoció que, aunque resulta complejo supervisar cada acción individual, se mantiene un monitoreo constante y un seguimiento permanente para prevenir y corregir este tipo de situaciones.
Este pronunciamiento se da en un contexto donde la ciudadanía exige mayor vigilancia y profesionalismo en el transporte público regional, especialmente en rutas que conectan municipios como Tepexi, Molcaxac, Ahuatempan e Ixcaquixtla.
La empresa reiteró su disposición a mejorar sus protocolos y mantener canales abiertos con la comunidad para fortalecer la confianza en el servicio.
